Un 29 de julio de 2013 nos
dejaba un vecino ilustre, una de esas personas valiosas que los pueblos
medianos y pequeños necesitan para mantener viva la Cultura, en esos municipios
donde no proliferan demasiado las actividades lúdicas con enfoque y matices cultos.
Y si algo definía a Enrique Holgado era su gran cultura, sobre todo musical,
sin venirse abajo cuando se interesaba por temas históricos, investigativos o
de medio ambiente. Su nombre irá siempre unido a la Coral Polifónica Jaire,
pero a través de esta biografía descubriremos muchas aristas y facetas de este
polifacético hombre que nos dejó demasiado pronto, quizá en ese momento de la
vida que sigue a la jubilación, en el que pudo disponer de más tiempo para sus
grandes aficiones: la música en muchas de sus presencias, como la investigación
a través de los códices, la audición de música clásica y la organización de
grupos corales; la investigación histórica en general y local en particular,
visitador habitual del Archivo General de Indias; el senderismo como medio para
fortalecer el cuerpo y liberar el espíritu y sus pasión por los viajes.
En una entrevista concedida al
periódico Villamartín Información en 2004 nos habla de su infancia. «Nací en
Salamanca en 1942 y la primera enseñanza la recibí de los salesianos y,
posteriormente, de los maristas. A la edad de 8 años comencé a cantar como
tiple de la Escolanía Virgen de la Vega de Salamanca donde tuve mis primeros
contactos con la música. Como es lógico, también jugaba con mis compañeros a la
banderita y al marro, sin olvidar que desde pequeño me encantaba leer». A una
edad muy temprana a Enrique lo montan sus padres en un tren, viajando solo bajo
la supervisión de la pareja de guardias civiles que vigilaba los trenes, camino
de una lejana ciudad para un niño. (Con su padre Enrique y su hermana Chon por una calle de Salamanca. Mayo de 1945)
.
«Mi juventud la pasé lejos del hogar, ya que
estudié el bachillerato en Pamplona, alternando estos estudios con los de
solfeo, canto y órgano. Sólo veía a mis padres en agosto».
Acabado el bachillerato marcha a
Lyon (Francia) para completar sus estudios musicales y obtener la diplomatura
en canto gregoriano. Continúa Enrique: «Tuve una juventud muy intensa,
logrando, pese a lo apretado de los horarios, practicar la pelota vasca y el
frontón. Cuando me cambió la voz pasé a barítono, recibiendo nuevas clases de
canto». Sabemos que en la década de 1960 llega a actuar como cantor, con su
voz de barítono, en una zarzuela en el teatro Villamarta de Jerez.
Las circunstancias familiares
hacen que lleguen sus padres a Villamartín. Su padre era salmantino y su madre
de Benaocaz y ante una enfermedad crónica de ésta los médicos le recomienda el clima del sur,
decidiendo asentarse la familia en Villamartín, por su buen clima y situación
estratégica, concretamente al final de la calle del Santo, donde lleva una
gestoría.
Por esa época Enrique ya ha
decidido hacerse sacerdote y estudia en la Universidad Pontificia de Salamanca,
viniendo a visitar a sus padres a Villamartín con sotana y fajín azul de
seminarista durante el verano.
Durante estos años de intenso estudio se completa
grandemente su cultura musical y se amplía en otros campos como reparador y
afinador de instrumentos litúrgicos (organero), encuadernador, restaurador de
libros, escritura musical…
Cuando ya está próximo a
finalizar sus estudios de Teología y completar la formación como sacerdote, se
presenta, con 19 años (1961), a una de las plazas más complicadas de conseguir:
organista de la catedral de Sevilla, quedando en un meritorio segundo lugar
tras el afamado José Enrique Ayarra.
Una decisión importante en su
vida fue apartarse de la vocación religiosa cuando ya estaba próximo a «cantar
misa», hecho que ocurre hacia 1961, por lo que tiene que rehacer su vida, mirar
al futuro y afrontar nuevos estudios con los que conseguir una profesión. En un
principio trabaja en Villamartín (1962-63), dando clases preparatorias de
ingreso al bachillerato en el Colegio Libre Adoptado Menéndez Pelayo, a la vez
que prepara de latín y música a los estudiantes de bachillerato.
Hacia 1963, con 21 años, marcha
a Granada, completando en dos cursos académico la carrera de Graduado Social,
por lo que vuelve hacia 1965 a Villamartín, ya inscrito en el Colegio Oficial
de Graduados Sociales de Granada. Se integra, en principio, en el despacho del
abogado Fernando Romero, pero pronto (febrero de 1966) monta ya despacho propio
en la calle Botica.
Como profesional fue un buen
asesor jurídico y económico en materia socio-laboral y empresarial. Experto en
relaciones laborales, economía laboral y de la empresa, recursos humanos y en
organización del trabajo. Su despacho era muy visitado por clientes de
Villamartín y de la Sierra, atendiendo de forma desinteresada en muchas
ocasiones al menos favorecido. Se jubila profesionalmente el 31 de enero de
2009.
Coincide con el párroco don
Manuel Jiménez Sutil en los últimos años de vida de este, que le anima a formar alguna agrupación
musical, naciendo así el coro de las Angustias. (Coro de las Angustias, primer coro fundado por Enrique en la primera parte de la década de 1960. En la imagen le acompañan las jóvenes: Candelaria Holgado Sañudo, María Luisa Espinosa Rodríguez, Cati Rodríguez Calderón, Mª Teresa Rodríguez Pavón, Montaña Peña Sánchez, Mercedes Chacón Holgado, Carmen Girón Zambonino, Mª Carmen de la Rosa Fraile, Tana Tinajero Piña, Lourdes Mozo Gutiérrez y Concha Álvarez García).
En 1969 conoce a Cristina Sáez,
maestra llegada a Villamartín desde Burgos, con la que contrae matrimonio del
que nacen tres hijos: Cristina, Marta y Álvaro.
Ya con el inicio de la
democracia, Enrique decide integrarse en
la lista electoral que presentó Alianza Popular en 1983 y posteriormente, en
1991, el Partido Popular, llegando a formar parte de la Corporación Municipal
villamartinense durante algún tiempo.
Musicalmente (de forma pública,
no privada, donde mantiene su formación permanente), hay un parón cercano a los
25 años que se dedica en exclusiva y con intensidad a su profesión y a su
familia. Pero su inquietud musical, sus ganas de ofrecer a los demás sus
conocimientos y su buena relación con el párroco don José Manuel Álvarez, le
lleva a integrase dentro del ámbito parroquial donde ve que puede investigar y
sobre todo aportar sus grandes conocimientos musicales en beneficio del pueblo.
Voy a reseñar cronológicamente
algunas de sus realizaciones en este campo.
· En la primavera de 1991 un
grupo de señoras de la Adoración Nocturna,
deseando homenajear a su párroco don José
Manuel con motivo de sus veinticinco años de estancia en Villamartín, quiso
cantarle en la función religiosa a celebrar a tal efecto la misa coral de Pío
X, para lo cual organizaron el coro parroquial al frente del cual se puso
Enrique Holgado. El 14 de julio aquella idea se convirtió en realidad y junto a
la citada misa, se interpretaron otras piezas que engrandecieron el acto,
terminando con el solemne Hymnus Te Deum, partitura enviada y dedicada
por el abad del Monasterio de Silos.
Con el párroco de Santa María de las Virtudes don José Manuel Álvarez y la Coral Polifónica Jaire, después de la liturgia del 55 aniversario de su ordenación sacerdotal, celebrada el 17 de junio de 2011. (Col. Andrés Alpresa).
· En
junio de 1992 se constituye de forma oficial la Coral Polifónica Jaire. Enrique,
asume su dirección musical. Entre los fines de la misma estaban el estudio,
conocimiento, difusión y práctica de la homofonía, canto gregoriano y música coral polifónica.
· Clásicos en Villamartín. A
principios de la década de 1990 comienza a programarse una iniciativa de la Delegación Municipal de Cultura que
pretende difundir la música clásica y que siempre contaron con la iniciativa,
presencia y asesoramiento de Enrique Holgado. Por las Angustias y San Francisco
pasaron durante años agrupaciones gaditanas, de otras provincias andaluzas y
comunidades autónomas e incluso de otros países. En muchos de los ciclos
Enrique actuó también como conferenciante.
· En
julio de 1993 la Coral Polifónica Jaire, como final del concierto
celebrado en la Iglesia Parroquial de Santa María de las Virtudes, estrena un
himno en honor a la Santísima Virgen de las Montañas, con letra de Manuel Vidal
Jiménez y música
de Enrique Holgado Caro:
¡Salve!, madre del Cielo.
¡Salve!, Virgen soberana.
Alcaldesa
de este pueblo.
Patrona
de la Comarca.
· En noviembre de 1993, Enrique dirige magistralmente a la Coral
Polifónica Jaire en el programa de Canal
Sur Televisión «Tal como somos», siendo seguida la emisión con gran interés
tanto desde Villamartín, como en directo en los estudios Calgari Films de
Camas, sobre todo la interpretación de «Maite» de P. Solozabal.
Febrero 1995. Conferencia para
dar a conocer los 10 olvidados códices cantorales de la Parroquia que datan de
1624 a 1631, tesoro cultural, estudiados por nuestro ilustre paisano,
musicólogo, erudito y hombre de docta opinión por su gran preparación. Basados
en ellos la coral Jaire preparó un concierto extraordinario. Enrique los
tradujo y dio a conocer, especialmente el oficio litúrgico original de Santa
Ana. Estos códices fueron enviados por Enrique, en octubre de 1991, para que
fueran vistos y comentados por la Orden de San Benito de la abadía de Santo
Domingo de Silos. (Imágen
tomada del libro Oficio Litúrgico de Santa Ana).
· En
marzo de 1997, dentro del marco de las Jornadas Fundacionales, Enrique Holgado
da una de sus grandes conferencias sobre «El órgano de la
Iglesia de Santa M.ª de las Virtudes». Su singularidad viene dada por su
antigüedad (1804). Durante años Enrique limpia y desinsecta los diversos
elementos del órgano parroquial, pendiente desde entonces de una restauración
en profundidad de su «corazón». (Enrique en el salón de plenos junto a José Vázquez, concejal de Cultura y Antonio Jarén, técnico de Cultura de nuestro Ayuntamiento).
· Beathe Anne. Capilla de música
de canto gregoriano fundada por Enrique hacia 1998 con voces exclusivas de
varones cantores (unos doce) que duro poco pero dejó un grato recuerdo tras su
estreno y actuaciones en diversos oficios religiosos. La razón principal para
su creación fue la celebración de IV Centenario de Santa Ana y cantar el oficio
litúrgico del 26 de julio de 1998.
· Para los Clásico en
Villamartín’98, forma otra agrupación coral, la Capilla de Canto Santa Ana,
integrada por villamartinenses siempre cercanos a Enrique y dispuestos a acudir
a su llamada.
· 1998. Enrique
publica el libro Oficio
litúrgico de Santa Ana. Crónica del IV Centenario (1598-19989), editado por
el Ayuntamiento de Villamartín. Los beneficios económicos de su venta fueron
destinados a la restauración de la imagen de nuestra patrona.
· Agosto
de 2000. Enrique compone y estrena en la parroquia de las Virtudes una
nueva misa en honor de Santa Ana, patrona de Villamartín. Igualmente quedó presentado
el himno de Santa Ana, según Enrique, su autor, «una composición corta, con
letra cariñosa que hace mención a la madre de la Virgen y abuela del señor, así
como su vinculación con el pueblo de Villamartín por su patronazgo».
· En
2001 es aprobado el organigrama del
Plan Director del V Centenario con motivo de la fundación de Villamartín.
Enrique queda adscrito a la Comisión Sectorial de Medio Ambiente.
· Septiembre de 2000. Con motivo
de los 15 años de la Coronación de la Virgen de las Montañas se llevó a cabo
una liturgia especial con la presencia de la Virgen en la parroquia donde se
estrenó una Salve en su honor, con letra y música de Enrique Holgado:
Salve,
Santa María. Salve, Señora mía.
Estrella
que me acompañas.
¡Oh Virgen de
las Montañas!
· Marzo de 2001-Junio de 2006.
El periódico Villamartín Información nos cuenta que Enrique dirige también un
grupo en Prado del Rey, la Agrupación Musical Pradense. Para ser interpretados
por ellos compuso la solemne misa In aeternum cantabo, dedicada al
párroco don José Manuel Álvarez. Finalmente la composición fue interpretada a
cuatro voces por la Coral Polifónica Jaire, soprano y órgano con motivo de las
bodas de oro sacerdotales de don José Manuel en junio de 2006.
· Septiembre
de 2003. En el atrio de la parroquia de las Virtudes presenta el Libro de Feria de ese año.
· Villamartín Información de 2006
ofrece una amplia entrevista con Enrique Holgado donde éste recapitula su paso tras 14 intensos
años de clásicos, grupos, capillas, coros y corales. Su colaboración con la
Delegación Municipal de Cultura se mantuvo pese a gobernar estos años tres
corporaciones municipales de distintos partidos políticos. Son muchas las
entrevistas y artículos en los medios de comunicación locales que nos hablan de
Enrique, a la vez que él manifiesta su parecer sobre temas locales y de la vida
en general, no solo musicales: medio ambiente, historia, importancia de la
amistad…
· Noviembre
de 2015. La Asociación Musical Manuel
Fraile y la Coral Polifónica de Villamartín volvieron a
unirse en un concierto de música que lleva por título «Réquiem», en homenaje a
dos vecinos que vivieron con pasión el mundo de la
música y la cultura: Manuel Fraile Toribio y Enrique Holgado Caro.
Para salir del despacho donde
pasaba largas horas y oxigenarse bien, Enrique, se integró en el Club de
Senderismo Tritón, grupo de Prado del Rey, con ellos recorrió y conoció nuestra
hermosa sierra gaditana y otros muchos puntos de España. Así hablaba de él uno
de sus amigos: «Lo que hace especial a
este andaluz de adopción es su amor a la naturaleza, su gran compañerismo, su
carácter abierto pese a parecer una persona reservada, su espíritu joven lleno
de ganas de descubrir y superar nuevos retos». (Con su club de senderismo Tritón de Prado del Rey en la sierra del Pinar donde instalaron un Belén el 18 de diciembre de 2004. Villamartín Información).
Para Enrique no corría el tiempo
rodeado de sus libros, de sus discos y de las largas sesiones de música que
escuchaba, especialmente clásica. A un periodista le confesó que sus gustos
personales se inclinaban por Beethoven, sobre todo su periodo romántico, aunque
«en música sacra, Bach es intocable. Fue
un ser especial que nació para eso». Cómo filósofo y
escritor su preferido siempre fue Miguel de Unamuno, sobre el que la familia
conserva el borrador de unas tesis doctoral escrita en su época de estudiante.
Buen viajero, visitaba cada año
muchas de las exposiciones de la fundación española de carácter religioso «Las Edades del Hombre», completándolo con diversos viajes por
España y Europa.
Principales ensayos y artículos
periodísticos:
· Ensayo literario titulado «El
Cristo yacente de Santa Clara frente al Cristo de Velázquez».
· La Voz del V Centenario. «En torno a 1503». Mayo de 2002.
· El Brillante. «La música como terapia de males». 1995.
· Libro de Feria. «Códices Cantorales en Santa María de las
Virtudes». 1994.
· Libro de Feria. «El claustro de San Francisco y la iglesia de la
Vera Cruz». 1995.
· Libro de Feria. «La aviación y su vinculación con Villamartín».
1996.
· Libro de Feria. «El clero de Villamartín durante el Renacimiento».
1997.
· Libro de Feria. «Historias interesantes de Villamartín. 2000, 2001,
2002, 2003».
· Libro de Feria. «La casa más antigua de Villamartín». 2004.
· Libro de Feria. «Primero fue la Archidiócesis Hispalense, pasado el
tiempo la Diócesis Asidonia-Jerez». 2007.
· Libro de Feria. «In memoriam del Ilmo. Señor don Manuel Pérez
Regordán». 2008.
· Libro de Feria. «¿Conoces el término territorial de Villamartín?»
2008.
· Libro de Feria. «Dosier sobre las últimas obras en la torre de
Santa María de las Virtudes». 2011.
· Libro de Feria. «Los libros de visitas del Santuario de Ntra. Srta.
de las Montañas». 2012.
· Libro de Feria. «Nuestra historia desde el callejero». 2013.
La noticia del fallecimiento de
Enrique en Stavanger (Noruega) cae como una losa sobre Villamartín, que
incrédulo, no se hace a la idea de esta ausencia que sufrirá su ya querido
pueblo. Todo ocurrió cuando disfrutaba de dos de sus pasiones: el senderismo y
el viajar. Con gran ilusión hace su «última ruta» a Preikestolen, formación
rocosa en la costa sudoeste de Noruega más conocida por El Púlpito. En su
última fotografía le vemos henchido de felicidad por el triunfo de la conquista
de ese hito. Ya en la bajada, y cuando iba al encuentro con Cristina, su
corazón decidió dejar de latir tras el sueño de la conquista de la montaña
realizado. La familia me ha facilitado las numerosas muestras de condolencia
que recibió, como la emotiva carta de la Hermandad del Santo Entierro, que «en nombre de todos y cada uno de los miembros,
nos unimos a vuestro pesar, enviando sinceras condolencias a la familia»;
la que recibe su esposa Cristina desde el Colegio de Graduados Sociales, que «impresionados por su fallecimiento, no
dudamos en calificarlo como un hombre honesto, serio y gran profesional»; o
la que aparece en un semanario: «Persona
de trato amabilísimo, de exquisita educación que a todos trataba con
deferencia, arregló muchos papeles, bastante de forma gratuita, en honor a la
humildad de los que los portaban». En el libro de condolencias quedaron dos
improntas que lo definen: «Enrique, eres
el hombre, que en Villamartín, más ha alabado a Dios con su música». «Enrique, no sabes cuánto te vamos a echar de
menos. Estamos seguros de que los acordes de todo aquello que compusiste, te
acompañarán siempre. Y nosotros no los podremos olvidar».
Un miembro de la coral Jaire, Antonio Chacón, me manifiesta que tras su
fallecimiento, hizo en diversos foros y momentos la propuesta de iniciar los
trámites necesarios para su nombramiento como hijo adoptivo póstumo de
Villamartín, como reconocimiento a su labor altruista descrita en esta
biografía. Pienso que hubiera sido lo justo, Enrique se lo merecía.
Cuatro años después de su muerte su querida coral Jaire celebró los 25 años de existencia, entregándole a la familia una placa en señal de agradecimiento.
Bibliografía:
· Colección de Libros de Feria. Ayuntamiento de
Villamartín. Varias fechas.
· Villamartín. Imágenes de un
Siglo I, II y III. Ayuntamiento de
Villamartín. 1989, 2012, 2016.
· Recortes
de prensa: Villamartín Información, La
Voz de Villamartín, Villamartín Noticias, Diario
de Cádiz, La Voz del V Centenario…) facilitados por la familia.
· Efemérides entorno a Villamartín. Manuel Vidal Jiménez.
Inéditas.
· El Brillante y El Brillante Literario. Varias fechas.
·
Diversa documentación privada facilitada por la familia.
· Diversas
y variadas informaciones obtenidas en web y blog.
Versión de esta entrada en PDF. <<Enlace>>.
©del texto,
Pedro Sánchez Gil, salvo entrecomillados.
© de las imágenes, colección de la familia
Holgado Sáez, salvo lo citado en los pies de foto.
© de la publicación «Villamartín.Cádiz
Blog de Pedro Sánchez»
Hermoso y digno artículo sobre una de las personas más ilustre de Villamartín durante el último siglo en Villamartín
ResponderEliminarMuchas gracias. Un saludos.
ResponderEliminarMusicalmente, será complicado encontrar un músico a su altura.
ResponderEliminarVillamartín no sabe lo que ha perdido y se le debe un gran homenaje
a su altura, como profesional, musicalmente
hablando y como persona.