Suceso prodigioso relacionado con la Virgen de las Montañas

En nuestras visitas a la ermita de las Montañas todos recordamos esa sala que estaba a la izquierda al acceder al patio de la casa de los santeros, lugar donde hoy se venden las velas y recuerdos. El lugar estaba repleto de objetos personales de todo tipo entregados a la ermita en agradecimiento al algún favor, para algunos milagros, recibido de la Virgen, los llamados exvotos, algún día hablaremos de ellos.

Exvotos de bronce, algunos de gran antigüedad. Santuario de la Virgen de las Montañas. Villamartin

Quizá el más sonado de los milagros atribuido a la Virgen de las Montañas fuera el documentado el 8 de septiembre de 1902. Tanto, que apareció en páginas de prensa de lugares tan alejados entre sí como Salamanca (El Lábaro), Sevilla (El Correo de Andalucía) y Tarragona (La Cruz). La hermandad difundió su fama imprimiendo una breve descripción en las patentes que constataban la condición de hermanos. El suceso prodigioso supuso la sanación definitiva de una devota de la Virgen de las Montañas, natural de Bornos, aquejada de un mal incurable. El relato detalla la dramática dificultad de ésta para llegar hasta la Imagen y la violenta reacción orgánica que sufrió y que hizo temer por su vida.

Presento la patente comentada y recortes de prensa de algunos de los citados diarios, que incluyen incluso certificados médicos.

Texto:

Elaboración propia basada en el capítulo Anexos del libro La Virgen de las Montañas, trabajado conjuntamente con Ernesto Pangusión Cigales.

Imágenes:

- Patente propiedad de la Hermandad.

- Recortes de prensa: El Lábaro y La Cruz.